martes, 2 de junio de 2015

Doña Rosita la soltera

Doña Rosita la soltera o el lenguaje de las flores, es una obra teatral escrita en 1935 por el dramaturgo español Federico García Lorca.

Argumento
Una pareja de novios ha de separarse por cuestiones de trabajo por parte del novio, pero antes de separarse se prometen amor eterno a pesar de la distancia que ha de separarles y el tiempo que deben estar sin verse. El tiempo pasa, pero Rosita sigue esperándole, ya que periódicamente va recibiendo las cartas de amor que éste le manda. Un día recibe una carta donde le propone en matrimonio, pero a través de unos poderes que él le mandará, sin estar él presente. Esa carta nunca llega y él cada vez muestra menos interés por las cartas que recibe de Rosita. Su amado finalmente le remite una, donde le indica que se ha casado con otra mujer de allí. Rosita, ante esta circunstancia no vuelve a creer en el amor y envejece sin que ningún otro hombre pase por su vida, ya que ella no puede olvidarse de su amado…

Espacio y tiempo
La acción de la obra se sitúa en una ciudad de provincia, Granada, y hay una gran brecha temporal entre los tres actos, habiendo entre el primero y el segundo quince años, y entre el segundo y el tercero, otros diez. Este paso del tiempo se ve reflejado en las modas y las costumbres, y en la apariencia y el desarrollo de los personajes.

Simbología
Según algunos datos aportados por el diario granadino Granada Hoy, García Lorca, construyó la trama de “Doña Rosita la soltera” inspirado en la vida de su primaClotilde García Picossi, que mantuvo una relación amorosa con su primo hermano Máximo Delgado García. que después de casarse con otra mujer en la provincia argentina de Tucumán, seguía enviando correspondencia a Clotilde para hacerle saber que algún día regresaría y se casaría con ella.
Desde el punto de vista del propio Lorca, esta emotiva historia que está considerada como una de las obras maestras del ámbito teatral del siglo XX y aún despierta el interés de millones de personas alrededor del mundo, no es más que la representación de “la vida mansa por fuera y requemada por dentro de una doncella granadina que, poco a poco, va convirtiéndose en esa cosa grotesca y conmovedora que es una solterona en España”.


Yerma

Yerma es una obra teatral popular escrita por Federico García Lorca que desarrolla una tragedia de ambiente rural. 

Argumento
El tema principal es instinto frente a represión, ya que Yerma lucha porque su instinto le dice que debe ser madre, pero no lo logra, y por eso termina odiándose. Por un lado, a través de un gesto radical, se libera de la esterilidad de Juan aunque no de su tragedia personal. Por otra parte, la determinación de Yerma de matar a Juan obedece en parte a su deseo de cumplir con una función impuesta por la sociedad; quiere tener hijos como las mujeres casadas que viven a su alrededor.

Simbología 
Lorca utiliza una amplia serie de símbolos como recursos para marcar los sentimientos o las situaciones de los distintos personajes a lo largo de la obra (tanto en Yerma como en otras muchas). Algunos de estos son: la imagen y mención al agua de lluvia o la fuente, que representan la fecundidad; del agua corriente y la leche, que es la esperanza que tiene la mujer de quedar embarazada; las flores (sobre todo la rosa), que son la alegría ante la maternidad; en cambio, la roca, la sequedad, la arena y las sombras simbolizan la esterilidad de así como el muro, que representa el impedimento.

Personajes principales
Yerma: es una joven casada con Juan, un hombre que su padre quiso para que sea su esposo. Ella ansiaba tener hijos como las demás casadas y por eso se casó con él, para buscar los hijos, no por amor. Al no poder tenerlos termina matando a Juan.
Juan: esposo de Yerma, no le importa no tener hijos; se preocupa por Yerma, a la que quiere y por su honra, así como su trabajo. No le importa que Yerma quiera hijos, para él no es lo principal.
Víctor: es amigo de la infancia de Yerma. Se da a entender que es el hombre con el que Yerma cree que puede tener hijos porque a su lado se siente diferente, pero su honra firme le impide intentarlo con otro que no sea su marido.
María: es amiga de Yerma, le da esperanza y siempre la intenta animar y armarla de paciencia para que no se torture más.

La casa de Bernarda Alba

La casa de Bernarda Alba es una obra teatral en tres actos del escritor Federico García Lorca que fue escrita en 1936.

Resumen 
Tras la muerte de su segundo esposo, Bernarda Alba se recluye e impone un luto riguroso y asfixiante por ocho años, prohibiendo a sus cinco hijas a que salgan a la calle. Cuando Angustias, la primogénita y la única hija del primer marido, hereda una fortuna, atrae a un pretendiente, Pepe el Romano. El joven se compromete con Angustias, pero simultáneamente enamora a Adela, la hermana menor, quien está dispuesta a ser su amante. Durante un encuentro clandestino de los amantes, María Josefa, la madre de Bernarda que mantienen encerrada por su locura, sale con una ovejita en los brazos y canta una canción absurda pero llena de verdades. Cuando Bernarda se entera de la relación entre Adela y Pepe, estalla una fuerte discusión y Bernarda le dispara a Pepe, pero éste se escapa.Tras escuchar el disparo, Adela cree que su amante se haya muerto y se ahorca. Al final de la obra, Bernarda dice que Adela se murió virgen para guardar apariencias, y exige silencio, como en el comienzo de la obra.

Personajes

Bernarda (60 años): su motivación es contar con una reputación perfecta. Posee un carácter férreo y autoritario. Es paradójica, pues es la más masculina de todas a la vez que constituye una barrera entre sus hijas y los hombres.

Angustias (39 años): es la hija mayor, nacida del matrimonio de Bernarda con su primer esposo, y la que heredará la fortuna de la casa.

Magdalena (30 años): es la segunda hija de Bernarda y la que más quería a su difunto padre (es la única que llora y se lamenta por él).

Amelia (27 años): su nombre significa sin miel, lo que da a entender que es una mujer amargada que ni sufre ni padece. Es la tercera hija de Bernarda y posee el carácter más tímido y asustadizo de todas ellas.

Martirio (24 años): es quizás el personaje más complejo de todos. Es una mujer resentida de la vida y llena de pensamientos turbios.

Adela (20 años): la hija más joven de todas. No está dispuesta a someterse a la tiranía materna y todo en ella es vitalidad.

Poncia (60 años): su nombre viene de Poncio Pilato y de ahí viene su actitud de no entrometerse directamente en nada. Es la criada principal, más bien ama de llaves, de la casa.

María Josefa (80 años): la madre de Bernarda, catalogada de "loca" (aunque lo más probable es que sufra demencia senil) sin participar demasiado en la vida familiar ya que su hija la recluye en su habitación.

Mujeres 1ª, 2ª, 3ª y 4ª: son mujeres de pueblo, cotillas y a la vez criticonas que fingen una amistad con Bernarda.

Pepe el Romano (25 años): en la obra no aparece físicamente en ningún momento, aunque es omnipresente. Es el catalizador de todas las pasiones e iras en la casa. Está comprometido con la hija mayor y a su vez mantiene una relación clandestina con la menor.

Prudencia (50 años): amiga de Bernarda.

Criada (50 años): fue amante forzosa de Antonio María Benavides, el difunto marido de Bernarda.



Bodas de sangre


Bodas de sangre es una tragedia en verso y en prosa del escritor español Federico García Lorca escrita en 1931.

Argumento
El tema principal tratado en este gran drama es la vida y la muerte.
Pero de un modo arcano y ancestral, en la que figuran mitosleyendas y paisajes que introducen al lector en un mundo de sombrías pasiones que derivan en los celos, la persecución y en el trágico final: la muerte.
El amor se destaca como la única fuerza que puede vencerla.

Personajes
Principales
El Novio: Hombre ingenuo y confiado, pero a su vez, sumamente apasionado. No está dispuesto a que le quiten a quien ama, a su novia, y en esta misma pasión encuentra la muerte.
La Novia: Mujer impulsiva, apasionada e indecisa. Dice ser arrastrada por una fuerza superior, para escaparse con Leonardo, o para que no la tachen de impura.
Leonardo: Apasionado, vigoroso, profundamente enamorado. No se avergonzó en abandonar a su mujer ni a su hijo para escaparse con la Novia. Está casado con la prima de la novia, lo que de cierta forma le priva y a su vez aumenta su deseo. Es el antagonista de la obra.
Secundarios
La mujer: Es la esposa de Leonardo. Entiende perfectamente el afán de su esposo por su prima, por lo que trata de evitarlo como puede. Sin embargo, evidentemente, no lo consigue.
La Luna: La luna juega un rol como "ayudante de la muerte", pues, a través de la iluminación que ésta otorga, interviene en el final trágico de los dos hombres.
La Muerte: También aparece en el bosque como una mendiga, descalza y totalmente cubierta por tenues paños verdeoscuros. Este personaje no figura en el reparto. Acompaña al Novio en busca de Leonardo y la Novia. Llega al funeral de Leonardo y el Novio.
"La madre": La madre del novio aparece durante toda la obra, y entrega información necesaria para la comprensión de la misma. Es una mujer luchadora de carácter fuerte y apegada a la tierra. Es una enemiga del uso de armas ya que gracias a estas perdió a su hijo y a su difunto esposo en una riña.
"El padre de la novia": El padre de la novia es un hombre anciano y quiere mucho a su hija tanto como la conoce. El sabe que ella piensa en Leonardo y no en su novio, pero quiere juntar los patrimonios de ambas familias y tener nietos que trabajen las tierras.

Símbolos
El caballo: Comúnmente es un elemento asociado con el sexo, la virilidad y la fuerza, características presentes en el personaje con el cual el caballo está fuertemente ligado a lo largo de toda la obra: Leonardo. Más globalmente, representa la pasión desenfrenada que conduce a la muerte.
Probablemente la mención más significativa de este símbolo se encuentra en la nana que cantan La Suegra y La Mujer en el segundo cuadro del primer acto.
En este, mediante el uso del caballo, se crea una ironía trágica que augura el desenlace fatal de la obra.
Luna: La luna es un elemento recurrente en la obra de García Lorca, simbolizando en la mayoría de las veces la muerte.
El Cuchillo: muerte y amenaza
La Mendiga: Simboliza la muerte.
La Corona de azahar: Simboliza la pureza de la mujer.


Retablillo de Don Cristóbal y Así que pasen 5 años

Retablillo de Don Cristóbal

El retablillo de Don Cristóbal es una farsa para guiñol en un acto escrita por Federico García Lorca en 1930. El título completo de la pieza es: Los títeres de cachiporra. Tragicomedia de Don Cristóbal y la Señá Rosita. Farsa guiñolesca en seis cuadros y una advertencia.
Argumento
Don Cristóbal es un adinerado bruto y malencarado, siempre con la cachiporra en mano, que busca una chica joven y guapa para desposarla (casarse con ella). Sus deseos coinciden con los de la madre de Doña Rosita, que aspira a encontrar un buen pretendiente para su hija. Llegados a ese punto, ambos acuerdan llevar a término sus fines, para desgracia del resto de personajes. Rosita, sin embargo, logra engañar a su ya marido y tiene encuentros con sus amantes, hasta dar a luz a cinco hijos, que reclama que son de Don Cristóbal. Éste, enfurecido, la emprende a golpe de porra con madre e hija. Pero ese será solo el principio de una larga trama de despropósitos, cachiporrazos y gritos.

Personajes
Don Cristóbal: Viejo verde y adinerado que desea casarse con Rosita.

Rosita: Joven de gran belleza, obligada a casarse contra su voluntad.

Madre de Rosita: Dispuesta a todo por dinero.

Enfermo: Que aspira a ser curado por Don Cristóbal.

Currito: Amante de Rosita.








Así que pasen 5 años


Así que pasen 5 años es una obra de teatro en tres actos, concluida por Federico García Lorca el 19 de agosto de 1931.

Argumento

Acto primero

En una Biblioteca, la Mecanógrafa declara su amor, no correspondido, al Joven que conversa con el Viejo. Irrumpen la escena el Amigo 1º, fanfarrón y mujeriego y el Amigo 2º que desearía descumplir años.

Acto segundo

Tras conversar con el Jugador de Rugby, la Novia, a solas con el Joven, le confiesa que desea romper el compromiso, para dolor del Padre y del Joven. Éste, habiéndose la Novia fugado con el Jugador de Rugby, se da cuenta de que su única oportunidad de ser padre es seduciendo a la Mecanógrafa, aunque el Viejo intenta impedirlo.

Acto tercero

En un bosque, la Mecanógrafa confiesa a la Máscara que abandonó al Joven, pese a los lamentos de él, un día de tormenta, cuando la portera acababa de perder a su hijo. El Joven, tras luchar con Arlequín y Payaso, se reúne por fin con la Mecanógrafa, pero ella condiciona su unión al transcurso de cinco años. De nuevo en la biblioteca, el Joven pierde a las cartas con los tres Jugadores y es asesinado por ellos cuando pretenden arrebatarle el as de corazones. En ese momento, suenan las doce del reloj.

La zapatera prodigiosa

La zapatera prodigiosa: farsa violenta en dos actos es una obra de teatro de Federico García Lorca que fue estrenada en 1930. En ella el autor ofrece una obra de perfil clásico, inspirada en el espíritu femenino, a medida que se desarrolla, se transforma en una alegoría del alma humana.

Argumento
Un matrimonio por conveniencia y la lucha de una mujer entre su realidad y sus verdaderos deseos, intenta dejar en evidencia cómo el ser humano se debate entre aquello que le presenta el destino y lo que él desea íntimamente desde lo más profundo de su alma. También la historia trata sobre la relación entre estos y sus discusiones.

Personajes
La zapatera: es una joven muchacha, de unos dieciocho años, vestida de color verde en el primer acto y rojo encendido en el segundo acto. 
A veces aparece algo antipática pero es debido a su infelicidad, lucha contra lo que le rodea. Al principio trata su marido con despecho, pero cuando el zapatero se marcha se da cuenta de que sí le ama.
Zapatero: es un hombre de cincuenta y tres años, hasta que se casó con la zapatera no tuvo otra esposa. No le gustan los escándalos, es pacífico y trata bien a su mujer pero se dejó influir por los demás. 
Descendía de una familia de caballerizos, por tanto no de una buena familia. Era rico y le convencieron para casarse. Él creía que no amaba a la zapatera pero se da cuenta que quiere a su mujer.
Alcalde: es un personaje machista y grosero, habla burlándose y con sorna. Viste de azul oscuro, gran capa y larga vara de mando rematada con cabos de plata. 
Ha estado casado cuatro veces y la dice piropos a la zapatera.
El niño: es dulce y sincero, le gusta estar en casa de la zapatera porque la quiere, y le da de merendar, juega con él y le hace regalos. 
Es la única persona del pueblo con quien se lleva bien la zapatera, le trata como si fuera su hijo. Es el niño el que descubre al zapatero disfrazado como viste .
Las vecinas: en la obra de teatro salen varias y siempre se están metiendo con la zapatera, critican todo lo que hace incluso la echan la culpa de que su marido se haya ido. 
También la hacen culpable de que los dos mozos se mataran. La zapatera siempre esta peleándose con todas las vecinas (Vecina Roja, Vecina Morada, Vecina Negra, Vecina Verde, Vecina Amarilla).
Otros personajes: beata 1º, beata 2º, sacristán, el autor, don Mirlo, mozo de la faja, mozo del sombrero.

Resumen
La zapatera prodigiosa trata de una mujer joven casada con su marido por conveniencia, por eso su actitud hacia el zapatero no es de ternura. Al principio habla de su marido con despecho y dice no estar enamorada de él, ya que el matrimonio lo decidieron terceras personas. La zapatera sueña amores imposibles.
En el pueblo, la gente habla mal de esta joven, sobre todo las vecinas, y por tanto La Zapatera tiene muy mala fama, le cantan coplas con desprecio, ella se siente sola y sólo tiene un gran cariño al Niño, que abre su actuación en la obra recibiendo el regalo de un muñequito.
El zapatero es infeliz, se casó con la zapatera a los cincuenta años y no había tenido ninguna esposa antes, es un hombre bueno y pacífico, trata bien a su mujer aunque se deja llevar por la opinión de los demás y es bastante generoso con todo el mundo.
La obra cierra el primer acto con la noticia de la marcha del marido. El Niño habla con la zapatera y le cuenta que su marido se ha ido (por culpa de todo lo que dicen de ella en el pueblo.)
La zapatera tiene que salir adelante trabajando en la taberna. El alcalde del pueblo sigue malmetiendo y hablando con sorna de la zapatera . Este personaje ha estado casado cuatro veces y le echa piropos y proposiciones a la joven.
El niño es con la única persona del pueblo con quien se lleva bien la zapatera, como ella no puede tener hijos propios, le trata como si fuera hijo suyo y ambos se quieren.
Pasa el tiempo y un día aparece en el pueblo un titiritero contando historias y entreteniendo a las gentes. Este personaje es el marido disfrazado que al hablar con la zapatera se da cuenta de que le quiere y le echa de menos.
Mientras tanto en la plaza del pueblo se pelean dos hombres y todas las vecinas dicen que es por culpa de la zapatera. Estos Mozos quedan heridos por una navaja y todas las voces acusan a la mujer del zapatero de la grave pelea.
El zapatero haciéndose pasar por titiritero extranjero, descubre lo mucho que quiere a su mujer y le pide perdón por haberla abandonado. Al final el matrimonio se declara abiertamente su amor y el autor acaba la obra con un cantar de coplas y el repicar de las campanas.


El maleficio de la mariposa y Mariana Pineda

Mariana Pineda
Mariana Pineda es una obra de teatro del poeta y dramaturgo español Federico García Lorca basado en la vida de Mariana de Pineda Muñoz, figura relevante de la restauración absolutista en España del siglo XIX.

Se escribió entre 1923 y 1925, y se representó por primera vez en 1927.
Personajes de la obra: Maria Pineda, Don Pedro Sotomayor, Ramón Pedrosa y Andrade, Amparo, Fernando, Niñas, Isabel la Clavela, Lucía, Alegrito, Doña Angustias, Niño, Mujer del velón, Niña, Sor Carmen, Monja, Monjas, Novicias (1, 2), Conspiradores (1, 2, 3, 4).

Escenógrafo:  Salvador Dalí.



El maleficio de la mariposa

El maleficio de la mariposa es la primera obra teatral de Federico García Lorca,(artista de la generación del 27) escrita en 1920 y estrenada el 22 de marzo de ese mismo año en el Teatro Eslava de Madrid, dentro de la programación del Teatro de arte dirigido por Gregorio Martínez Sierra. Con sólo cuatro representaciones, abucheos incluidos, supuso un total fracaso para su autor.

Argumento: La obra consta de varios personajes como: Curianito, el Nene; Doña Curiana; Curianita Silvia; Alacranito, el cortamimbres; Mariposa; Curianas guardianas; Gusano número 1; Gusano número 2; Gusano número 3; entre otros.


En una comunidad de curianitas -o cucarachas- destaca Curianito entre los demás por su vocación poética, siendo despreciado por el resto de miembros, entre ellos su madre y su pretendiente, la Curianita Silvia, a la que él rechaza sistemáticamente. La llegada de una mariposa con el ala rota, moribunda, supondrá un gran cambio para la visión que Curianito del mundo, que se enamorará profundamente, y, en el momento en que se declara, muere la mariposa en una danza  provocando a su vez la trágica muerte de Curianito.


Sonetos del amor oscuro

Los Sonetos del amor oscuro, o simplemente Sonetos, son una colección de sonetos escritos durante sus últimos años de vida por el poeta y dramaturgo español Federico García Lorca (Granada, 1898–1936), recopilados y publicados póstumamente. Por tanto, no es un libro definitivo establecido por el autor, y las diferentes ediciones pueden variar, tanto en el índice como en el título, dependiendo de las fuentes en que se base el editor.

Análisis

El amor oscuro

 En respuesta a la publicación de los Sonetos del amor oscuro en el ABC, Aleixandre manifestó su sorpresa por cómo se evitaba cuidadosamente mencionar la palabra «homosexual» en los artículos escritos sobre el tema. Para el poeta, había que aceptar en Lorca al hombre entero, y planteaba que no se puede comprender su obra sin tener en cuenta su homosexualidad.
También el hispanista italiano Carmelo Samonà señalaba la «curiosa reticencia» que se mostraba «desde las páginas del diario madrileño. ¿Por qué? ¿En 1984 es realmente necesario defender a Lorca de sí mismo?» En el mismo sentido se pronunciaba, tras un estudio de los sonetos, Víctor Infantes: «En (casi) todo lo leído sobre los Sonetos del amor oscuro se evita cuidadosa y cautelosamente mencionar, sugerir, apuntar la homosexualidad de García Lorca.» El propio Gibson ha apuntado que dicha elusión, en «los malos críticos de siempre» y «en ciertos lorquistas», pudiera estar motivada en evitar problemas con la familia, por temor a que se les cerraran «las puertas del archivo de la Fundación García Lorca».
Daniel Eisenberg concluye que, aunque Lorca pensara abordar un concepto más amplio y un título más genérico para su colección de sonetos, el sentido «comúnmente admitido» sobre los poemas amorosos, los que él llamó Sonetos del amor oscuro, sigue siendo correcto. A ello no escapa, según Eisenberg, la comparación que hizo el propio Lorca de su libro con los Sonetos de Shakespeare (con una ampliamente divulgada implicación homosexual) o la mención de Mario Hernández a Verlaine como referente para el título Jardín de los sonetos.
Erotismo y éxtasis
Uta Felten señala que, como sucede en el Diván del Tamarit, «sangre, éxtasis, deseo, dolor, violencia y martirio» son los temas en torno a los cuales giran losSonetos del amor oscuro. Cita el «Soneto de la guirnalda de rosas», donde el «yo lírico» se muestra como un mártir erótico:
  Goza el fresco paisaje de mi herida,
  Quiebra juncos y arroyos delicados.
  Bebe en muslo de miel sangre vertida.
Aparece de nuevo en <Noche del amor insmone>:
La aurora nos unió sobre la cama,
las bocas puestas sobre el chorro helado
de una sangre sin fin que se derrama.


O se rasga las venas en «Soneto de la carta» («El poeta pide a su amor que le escriba»), una réplica erótica de la místicade San Juan de la Cruz que remite, por las imágenes del cuerpo herido que se ofrece al amado, a la leyenda del martirio de San Sebastián:

Pero yo te sufrí, rasgué mis venas,
tigre y paloma, sobre tu cintura
en duelo de mordiscos y azucenas.


Esta lectura del amor oscuro conduce a una referencia intertextual de San Juan de la Cruz y su famosa «Noche oscura», mencionada por García-Posadas en su introducción a los poemas. Incide en ella también Uta Felten, señalando la intertextualidad entre ambos autores, evidente en «El poeta pide a su amor que le escriba» o en «Soneto de la guirnalda de rosas», diciendo que Lorca «recurre al principio de la concordia discors para poner en escena la "dolorosa voluptuosidad", el dulce dolor de la experiencia mística.» En el verso «Goza el fresco paisaje de mi herida», del «Soneto de la guirnalda de rosas», la autora interpreta una referencia «a la "herida feliz", al dulce dolor de la experiencia mística»; la imagen de la azucena que cierra «El poeta pide a su amor que le escriba» reenvía de nuevo a la «Noche oscura», que acaba con el verso «entre azucenas olvidado», así como al Cantar de los cantares, donde la imagen de la azucena mantiene una carga erótica y sexual intrínseca al tiempo que, debido a la transformación a lo divino de la obra, se convierte en una imagen clave del lenguaje místico.

La muerte
Jenaro Talens encuentra un recorrido en la poesía de Lorca, que parte de una primera etapa vitalista que se elevaba «sobre la expresión de sensaciones y la voluntad de transmitirlas», desde Libro de poemas al Romancero gitano, pasando por la violencia de Poeta en Nueva York, que lo hacía «sobre un deseo de conocimiento» y que Talens considera un «punto de no retorno en su obra» que le conduce hasta su poesía del último periodo, la «lucidez de la tragedia» que en el Diván del Tamarit o los Sonetos, se apoya en la «asunción trágica de que ambos procedimientos conducen a un mismo lugar: la muerte».

Diván del Tamarit

Estructura

La primera edición del libro, publicada en la Revista Hispánica Moderna, constaba de sólo once gacelas y nueve casidas; la «Gacela del mercado matutino» fue incorporada en ediciones posteriores del Diván al cierre de las gacelas, subsanando un supuesto error por omisión de RHM. Por ello, se encuentran ediciones del Diván del Tamarit que constan de doce gacelas y nueve casidas. La edición de Mario Hernández para Alianza Editorial en 1981 la incorporaba en un apéndice, junto al poema «Dos normas» (dos décimas «Dedicadas al gran poeta Jorge Guillén»), publicado entre las «Poesías inéditas» que cerraban la primera edición de 1940.

Prólogo

El prólogo que escribió García Gómez para la fallida edición de la Universidad de Granada, «Nota al Diván del Tamarit», no se añadió a las primeras ediciones del libro, y el propio autor, no pensando que nunca fuera a ocupar su sitio, lo acabó añadiendo a su libro Silla del moro y nuevas escenas andaluzas en 1954. Sí se añadió a la edición en España de Mario Hernández en 1981.

En el prólogo, y tras recordar la lectura de 1934 en que Lorca anunció el proyecto del Diván, García Gómez proporciona, como buen arabista, una serie de definiciones básicas.

A continuación aclara que pese a que el uso que hace Lorca de esas denominaciones es arbitrario, por cuanto no se ajusta a sus definiciones, el Diván no se inserta en el orientalismo de «máscaras literarias de un carnaval romántico» y sus poemas son «auténticamente lorquianos», un homenaje de simpatía que se inserta en el estudio de la herencia andalusí.

Gracelas y Casidas

A continuación aclara que pese a que el uso que hace Lorca de esas denominaciones es arbitrario, por cuanto no se ajusta a sus definiciones, el Diván no se inserta en el orientalismo de «máscaras literarias de un carnaval romántico» y sus poemas son «auténticamente lorquianos», un homenaje de simpatía que se inserta en el estudio de la herencia andalusí.

Gracelas
  • I. Gacela del amor imprevisto
  • II. Gacela de la terrible presencia
  • III. Gacela del amor desesperado
  • IV. Gacela del amor que no se deja ver
  • V. Gacela del niño muerto
  • VI. Gacela de la raíz amarga
  • VII. Gacela del recuerdo del amor
  • VIII. Gacela de la muerte oscura
  • IX. Gacela del amor maravilloso
  • X. Gacela de la huida
  • XI. Gacela del amor con cien años
  • XII. Gacela del mercado matutino
Casidas
  • I. Casida del herido por el agua
  • II. Casida del llanto
  • III. Casida de los ramos
  • IV. Casida de la mujer tendida
  • V. Casida del sueño al aire libre
  • VI. Casida de la mano imposible
  • VII. Casida de la rosa
  • VIII. Casida de la muchacha dorada
  • IX. Casida de las palomas oscuras
Análisis

La muerte

Jenaro Taléns habla de un recorrido en la poesía de Lorca, de lo elegíaco de una primera etapa (que abarca desde Libro de poemas al Romancero gitano) que «se elevaba sobre la expresión de sensaciones y la voluntad de transmitirlas», pasando por Poeta en Nueva York, punto de no retorno en su obra que lo hacía «sobre un deseo de conocimiento», hasta el Diván del Tamarit, que se apoya en la «asunción trágica de que ambos procedimientos conducen a un mismo lugar: la muerte».
García-Posada analiza la presencia de la muerte en los poemas del Diván. En la «Gacela del amor con cien años» los «cuatro galanes» que inician el poema se van diluyendo con el paso del tiempo en el olvido y la muerte: «Por los arrayanes / se pasea nadie.» En la «Gacela de la huida», el poeta siente en lo vivo el acoso de la muerte:
No hay noche que, al dar un beso,
no sienta la sonrisa de las gentes sin rostro,
ni hay nadie que, al tocar un recién nacido,
olvide las inmóviles calaveras de caballo.
La «Gacela de la muerte oscura» expresa el horror de Lorca al mundo de la ultratumba, horror que se revela también en el sueño de la «Casida del sueño al aire libre».

A la muerte conduce la mujer fecunda en la «Casida de la mujer tendida»: «bajo las rosas tibias de la cama / los muertos gimen esperando turno.» La «Casida de los ramos» surge de la omnipresencia de la muerte; García-Posada dice que una tormenta de septiembre convierte la Huerta del Tamarit en un jardín irreal, los ramajes rotos, «símbolos de la vida del autor», amenazados por unos perros que son «heraldos de la muerte»:
Por las arboledas del Tamarit
han venido los perros de plomo
a esperar que se caigan los ramos,
a esperar que se quiebren ellos solos.
Hay varias muertes en el agua en el Diván, tanto en la «Gacela del niño muerto» como en la «Casida de la muchacha dorada». Comienza las casidas con la «Casida del herido por el agua», poema que reproduce la situación de la «Niña ahogada en el pozo» (Poeta en Nueva York). El poema expresa, según García-Posada, una profunda solidaridad con los que sufren: «quiero llenar mi corazón de musgo / para ver al herido por el agua.», impulso solidario que se liga a la percepción de un desconsuelo universal, tema de la «Casida del llanto». Finalmente, analiza la «Casida de la mano imposible», en la que señala varias «metáforas del sufrimiento y la muerte moral conjuradas por la Sagrada Forma»; una aproximación cristiana a la muerte, en la que la mano imposible sería la mano de un Cristo en que el poeta expresa el deseo de creer.